Del gaming al iGaming: la evolución tecnológica del entretenimiento online

¿Cómo pasamos, sin siquiera darnos cuenta, de reunirnos en salas comunes a meeting en plataformas online, donde el dinero ya no corre entre nuestras manos, sino con tan solo un click?

El ruido constante de las monedas tiradas sobre la mesa, las sombras de los jugadores por la luz central y la emoción entre palmadas de mano tras cada victoria. Así empezó todo. Hoy, ese mismo espíritu lo vemos reflejado en millones de dispositivos móviles, donde jugadores de todo el mundo apuestan, juegan y socializan en plataformas y entornos digitales que evolucionan día tras día.

¿Cómo pasamos, sin siquiera darnos cuenta, de reunirnos en salas comunes a meeting en plataformas online, donde el dinero ya no corre entre nuestras manos, sino con tan solo un click? Así ha cambiado la forma en la que consumimos el entretenimiento online, y no sólo, sino también la relación con el entorno digital.

Cuando la apuesta se vuelve digital, así nace el iGaming

El paso del casino físico, el establecimiento donde se acudía anteriormente con entusiasmo para apostar tus mejores jugadas, a aquel virtual fue un cambió inesperado. Los expertos en el sector te dirán que se podría incluso comparar con la llegada de Internet o del primer teléfono móvil.

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Si echamos la vista atrás vemos cómo, a pesar de que las primeras plataformas de iGaming datan de los años 90, se caracterizaban por ser muy sencillas y poco seguras. Pero esto no es lo que queremos destacar, sino el hecho que no estamos hablando de algo recientemente novedoso. Además, sin ir muchos años atrás, nos encontramos juegos como Angry Birds o Candy Crush, que demostraron que cualquiera podía ser un "gamer".

El cambio no se hizo esperar mucho, pues todo cambió con la mejora de los sistemas de seguridad online, la regulación del sector y la llegada de las nuevas tecnologías. Ahora, las plataformas son entornos seguros, atractivos y llenas de posibilidades. Un hecho que se puede comprobar con la proliferación de  plataformas online de juego o incluso comparadoras como podemos observar en la evolución que presentan los casinos online de Time2Play, plataforma especializada en juego de azar online. 

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Pero, ¿cómo es todo esto posible? Gran parte del éxito se lo lleva el factor "comodidad", capaz de ofrecer las mismas experiencias, o mejores (dependiendo de cada persona), en la comodidad de tu casa. Entonces, el verdadero auge llegó de la mano de los smartphones. Con él, los usuarios podían apostar por su equipo favorito mientras esperaban a sus hijos salir de los extraescolares, o podían jugar al póker mientras tenían su mano agarrando al asiento delantero del bus, de camino a su casa. ¿No te suena como algo novedoso, verdad? Esto ya se ha convertido en nuestra normalidad.  El fácil acceso a las plataformas se convirtió en el detonante del iGaming.

Las nuevas tecnologías llevaron la experiencia de juego a otro nivel

No podemos pasar por alto otro factor relevante para este cambio. Los avances tecnológicos, como la inteligencia artificial, la realidad aumentada y virtual, han sido herramientas clave con gran poder innovador.

Herramientas como el machine learning y el big data, junto con la IA, son capaces de entender los hábitos de consumo y preferencias de cada usuario, elevando su experiencia. El proceso es muy simple; existen unos algoritmos que detectan los comportamientos más usuales de cada jugador, de modo que "entiende" sus hábitos y le ofrece, de manera discreta, alternativas que se adaptan a él. Ahí aparece otro factor clave, la personalización.

Por otro lado, las criptomonedas también juegan un papel clave para redefinir el panorama. Los casinos que ya aceptan pagos con Bitcoin, NFT y otras monedas digitales suelen ser la opción preferente para los usuarios; esto es debido al anonimato, la transparencia y a las menores comisiones que estas opciones ofrecen. Es normal seguir teniendo dudas o verlo como algo incierto, pero la tecnología llega para quedarse y sorprendernos con cada pequeño avance que hace.

El futuro, aunque no muy lejano

Las nuevas tecnologías ya se van amoldando a nuestra cotidianidad, hasta el punto de volverse algo usual en nuestras actividades diarias. Sin embargo, hay otras vías que aún no se han descubierto en su totalidad y ofrecen un sinfín de oportunidades.  Plataformas como Decentraland o el Metaverso ya dan la bienvenida a casinos virtuales, espacios situados en un entorno digital con elementos y personajes típicos de los casinos tradicionales.

Una opción tan incierta como atractiva donde los usuarios (donde se crean su propio avatar, y eligen desde su género, color de pelo, nombre, elementos e incluso la ropa) interactúan, socializan, se comunican y juegan entre ellos. No se conocen, no se dan las manos tras cada jugada, ni se miran a los ojos para intentar descifrar sus próximos movimientos y el dinero ya no va y viene en las mesas. Ahora juegan y apuestan en salas virtuales donde crupieres online y en directo simula la atmósfera de los casinos más exclusivos.

Entonces, aunque estemos hablando del futuro, lo más posible es que ya sea parte de nuestro presente. ¿Te imaginas participar en un torneo de póker, "sentarte" al lado de otros jugadores y leer sus expresiones faciales a través de sensores que se reflejan en sus avatares? ¿O apostar en un partido de fútbol mientras lo ves en tus gafas de realidad virtual desde el salón de tu casa? En un entorno tan cambiante, las posibilidades son infinitas.